ASTROLOGÍA CHINA: CABRA

• Abril 07, 2017

LOS AÑOS DE LA CABRA:   1907   1919   1931   1943   1955   1967   1979   1991   2015   2027   2039   2051

El nativo del signo Cabra es un ser sensible, sensual y tierno. Sin embargo, su naturaleza dulce y soñadora le da un carácter frágil, infantil, cambiante y lunático. Tiene realmente más necesidad de ternura, comprensión y atención que la que él está dispuesto a dar a los demás. De ahí que a menudo tienda a complicar las cosas, pensar mal, a creer que no le aman tanto como él ama, a dramatizar las situaciones, a sentirse incomprendido o despreciado, a lamentarse de su destino. Como  vemos, presenta muchos puntos en común con las carácteristicas atribuidas al nativo de Cáncer de nuestro Zodíaco. Como él, el nativo de Cabra está muy atado a su comodidad, gustos, hogar y familia. Sin embargo, le gusta también preservar cierta independencia, al mismo tiempo que quiere sentirse seguro y apoyado por su entorno en todo momento. 

Su sentido innato y refinado de la belleza hacen de él un esteta de buen gusto, es decir, que antepone la belleza a cualquier otro valor. Muy exigente, aspira a  encontrar y conseguir el "no va más" en todos los campos, lo que le lleva a menudo a vivir por encima de sus posibilidades o a hacer excesivas concesiones, a veces, para satisfacer sus necesidades. Evidentemente, no le faltan ni la habilidad, ni la gentileza, ni la dedicación e imaginación para ser perfectamente capaz de conseguir por sí mismo todo lo necesario para su confort y bienestar.

Aun así, le falta ambición y confianza en sí mismo, le horroriza la lucha y las relaciones de fuerza, y el mundo exterior a menudo supone una angustia para él. Como consecuencia, necesita que le animen y le apoyen a la hora de actuar o emprender algo. Lo ideal para él es poder trabajar en un marco tranquilo, armonioso, o dedicarse a una actividad liberal o artística que podrá ejercer en su propia casa sin tener que alejarse mucho de su medio habitual..En efecto, casi siempre está dotado de un don o talento que no deberá despreciar si quiere alcanzar la plenitud, ya que a veces es descuidado o perezoso, pasivo o demasiado miedoso. Se protege entonces excesivamente contra todo peligro de cambio o evolución en su vida, con el riesgo de quedarse estancado o en una situación sin salida. En este caso también necesita que le ayuden a bajar de las nubes, a abrir los ojos, abandonar sus sueños para enfrentarse a la dura realidad de la vida. Si lo consigue, puede demostrar finalmente que es eficaz, tenaz, de gran sensatez y diplomático en una vida social y profesional que promete entonces ser muy rica.

No hay nada más romántico que un nativo de Cabra. El hombre de este signo aspira a despertar a la Bella Durmiente en su castillo. Para ella, es capaz de superar todos los obstáculos, a condición de que la bella en cuestión sea una mujer inteligente que sepa animarle, reconfortarle, consolarle y rodearle de ternura en todo momento.

La mujer de este signo espera a su principe azul. Tiene que estar a la altura de sus sueños, que la despierte y la lleve a un país encantado. La fórmula final de los cuentos de hadas "fueron felices y comieron perdices" le viene como anillo al dedo. Es una esposa y madre ideal, muy afectuosa, pero las obligaciones de la vida cotidiana la sobrepasan, ya que es muy desordenada.

CABRA-ARIES: Este nativo tiene fama de no dejarse arrastrar. Dice siempre lo que piensa y no tiene pelos en la lengua. No sabe frenar sus impulsos. Le gusta obrar a su modo, pero tiende a lanzarse de cabeza a las situaciones más estrafalarias, con el riesgo de pillarse los dedos enseguida. No importa, siempre se vuelve a levantar y sigue su camino, preparado para precipitarse a la primera ocasión. Y de tanto en tanto, le atrae salirse del camino trillado.

CABRA-TAURO: Le gusta la comodidad, la seguridad material y la tranquilidad. Su principal preocupación es casi siempre procurarse los medios necesarios para asegurarse días tranquilos y sin tener que caer en la necesidad. Organiza así su vida a largo plazo, armándose contra lo imprevisto, pero sabiendo, oportunamente, aprovechar cualquier circunstancia que pudiera aportarle una ventaja suplementaria. Tiene cierto gusto sensual y refinado. Nunca tiene prisa. Pero cuando quiere obtener algo, sabe cómo hacerlo.

CABRA-GÉMINIS: De este nativo podríamos decir que tiene habilidad para todo, pero que no sabe hacer nada. No le falta ni inteligencia, ni espíritu, ni confianza en sí mismo, pero sí le falta concentración, perseverancia y disciplina. Cuando se siente más a gusto es en aquellas situaciones o circunstancias donde puede jugar con varios registros, seducir, convencer, transmitir, interpretar, hacer reír o distraer. Es un comediante nato, inestable, caprichoso, hablador, que hace de su vida una constante paradoja, con cierta complacencia.

CABRA-CÁNCER: Este nativo tiene una necesidad tan imperiosa de ternura y sabe tan bien cómo enternecer a los demás, que siempre se tiene la sensación de que está a punto de llorar. Es verdad que es sensible y vulnerable, vive a menudo bajo el miedo o a la defensiva, se inquieta por nada. Pero es también hábil para entregarse a sus sueños o a su imaginación, a veces delirante. Necesita formar parte de un clan.

CABRA-LEO: Tiene necesidad de que le quieran, le admiren, le feliciten. Y en efecto, sucede a menudo que le adulan, ya que posee un encanto irresistible, a veces incluso auténtico carisma. No se conforma con hacer lo que sabe hacer mejor, necesita también el triunfo y los honores. Pero, bajo sus aires de gran señor, es más frágil y dependiente de lo que parece. Incluso a veces esconde un auténtico complejo de identidad.

CABRA-VIRGO: El nativo de Virgo es sensato o necio, según el caso. Ahora bien, en esta combinación, la necedad o locura de Virgo está totalmente encarnada por la Cabra. Así, estamos ante un ser muy razonable y muy ordenado, reservado y concienzudo, disciplinado y riguroso que, sin el menor aviso, es capaz de un ataque de locura, preso de un impulso descontrolado. Coge luego a todo el mundo desprevenido haciendo algo que nadie espera.

CABRA-LIBRA: Tiene mucho talento, pero por miedo a decepcionar o a decepcionarse, es decir, por culpa de un orgullo disimulado, o por miedo de comprometerse o acabar lo que emprende, queda a la expectativa. A partir de ahí, si no tiene alguien en su entorno que le empuje a ir hacia delante, a tomar iniciativas, no se decidirá durante mucho tiempo, sin saber qué camino escoger.

CABRA-ESCORPIO: Este nativo sabe muy bien lo que quiere, aunque no lo diga o no lo demuestre en absoluto. En efecto, cuando se activa para realizar algo que le interesa muchísimo, satisfacer sus deseos o sus ambiciones, nada ni nadie se le podría resistir. A menudo se atormenta por profundas angustias que compensa con una gran curiosidad, una sensualidad intensa, magnética y un espíritu luchador que puede revelarse temible.

CABRA-SAGITARIO: Su amor a la libertad es sólo comparable con su sed de aventura. Y sin embargo, a pesar de su gran necesidad de independencia que le hace salvaje e indomable, especialmente en su vida amorosa, no por esto está menos apegado a ciertas principios que son puntos de referencia a los que siempre vuelve, ya que resultan necesarios para su equilibrio. Así, mientras está claro que le gusta enfrentarse con lo desconocido, en el fondo tiene sólidas raíces.

CABRA-CAPRICORNIO: Tiene sentido de la responsabilidad. También sabe tomarse su tiempo para reflexionar y no actúa jamás sin tener una idea precisa en su mente, a la que se aferra. Es discreto, posee cierta distinción y le gusta distinguirse en un contexto elegido, con personas de calidad. Su honestidad es proverbial, su humor, muy fino. Odia las fiestas ampulosas y las mentes sectarias. Simplemente vive, pero no como todo el mundo.

CABRA ACUARIO:  Totalmente inadaptado a la vida social y material, llena de coacciones, esfuerzos, obligaciones que cumplir, este ser aspira a vivir en un mundo utópico, donde cada uno es libre y donde todo el mundo sería rico. No se puede ser más inconformista que él, de la misma forma que nunca es indiferente a los problemas y preocupaciones de los demás y sabe mostrarse entregado y solidario. Paradójicamente, se muestra más dotado cuando se trata de intervenir a favor de los demás que cuando son sus propios intereses los que estan en juego.

CABRA-PISCIS: Su fuerza es su sorprendente intuición, su visión completamente original y penetrante de los aspectos de la vida y de la evolución de las circunstancias y los acontecimientos del contexto en el que vive. Podemos escucharle y seguir sus consejos, ya que tiene una visión correcta y sabia. En cambio, no está nada preparado para pelearse y defenderse. Le falta realismo y a menudo se hace ilusiones. Tiene pues necesidad de que estén a su lado, ya que aunque él sabe guiar a los demás, él mismo puede dar pasos en falso.

TAROT SABIDURÍA METAFÍSICA  -MARA-

ASTROLOGÍA CHINA: CABALLO

• Abril 04, 2017

LOS AÑOS DEL CABALLO:   1906   1918   1930   1942   1954   1966   1978   1990   2014   2026   2038   2050

El nativo del caballo es una fuerza de la naturaleza de temperamento ardiente y combativo, pero también un ser frágil, elegante y refinado. Tiene necesidad de aparentar, ser reconocido, pavonearse y destacar en sociedad. De inteligencia ágil y elocuencia excepcional, posee un sutil poder de persuasión, suscita simpatía y admiración o bien envidia y enemistad, a veces simultáneamente. Hay que decir que, así como le gustan las relaciones humanas, los intercambios, los contactos y las fiestas mundanas más que otra cosa, al mismo tiempo es demasiado cambiante y voluble y tiene miedo a sentirse controlado, a que alguien invada su territorio que, por otra parte, ya encuentra demasiado estrecho para él solo. También teme ser privado de su independencia. Tiene necesidad de cambios, espacio, viajes, ensanchar su horizonte, saciar su curiosidad y poder dar rienda suelta a sus impulsos, a veces, irreprimibles, que pueden empujarle a partir sin avisar, de la noche al día.

Fogoso, impetuoso y salvaje, rápido como el rayo, indomable e imprevisible, de golpe puede mostrarse tranquilo, impasible, sereno, lleno de encanto y humor, muy atractivo, irresistible. Pero se trata de una breve tregua... o de la calma que precede la tormenta, ya que, la mayoria de las veces, tiene necesidad de precipitarse, moverse, lanzarse con los ojos cerrados hacía una hiperactividad no siempre constructiva, excepto si tiene un objetivo que lograr, una decisión rápida que tomar o si debe lanzarse en una carrera o aventura estimulante para él.

Destaca en todos los dominios de la vida o actividades que exigen cierta improvisación, una entrega instantánea y profunda, una capacidad de estar en varios frentes a la vez y realizar el máximo esfuerzo en un corto período de tiempo. Cuanto más urgente sea la iniciativa a tomar o la acción a emprender, mejor se siente. No le gustan las situaciones que se alargan y se eternizan.

Necesita ver resultados lo antes posible. Así, lo que le motva es la intensidad del momento, raramente su duración, la continuidad, los proyectos o empresas a largo plazo.

También su corazón se acelera fácilmente, pero se ahoga o se cansa con la misma facilidad.

En efecto, aunque resulte paradójico, es leal. En amor, también, se entrega en cuerpo y alma en la intensidad del momento.

Ahora bien, en principio es sincero, pero no soporta las relaciones tibias o monótonas, la rutina, la vida de pareja día a día..

Tiene necesidad de pasión cotidiana, de seducir y ser seducido, sorprendido, asombrado, de conquistar, dejar volar su mente en un reino mejor, más grande, más maravilloso, un mundo sin fronteras, en estado salvaje, donde pueda correr con toda libertad, sin parar jamás. 

Entonces, cuando no siente tanto ardor amoroso, se evade, busca una nueva conquista, una nueva pasión, de la que se convencerá que esta vez será para siempre, que será el Amor con A mayúscula. Así galopan los nacidos bajo el Caballo del zodíaco Chino, a la búsqueda de un amor imposible, un amor de ensueño o a lo mejor simplemente a la búsqueda de sí mismos...

CABALLO-ARIES:  Arranca siempre deprisa, pero se cansa y rara vez alcanza sus objetivos. Este nativo impetuoso e impaciente necesitaría un poco de contención, de disciplina y de perseverancia, pero funciona a base de impulsos y no escucha a nadie. A menudo da la sensación de estar a punto de irse, de evadirse y de dejarlo todo. Sólo le puede atar el amor.

CABALLO-TAURO: Es como un caballo de tiro que ara, pero no es un esclavo. Le gustan demasiado las comodidades y sus costumbres para eso. Le gusta sobre todo ser amado y que se esté atento a sus deseos. Bajo una apariencia tranquila, hierven profundas pasiones amorosas y  carnales. Es capaz de alimentar rencores tenaces que expresará con enfados devastadores. Es muy susceptible, sobre todo si se trara de dinero.

CABALLO-GÉMINIS: En este nativo, hay nobleza, brillantez, clase innata. Pero su lema es "quien me quiera, que me siga" y hay que ser muy astuto para poder decir cuál es su verdadera personalidad. Para él, la vida es un inmenso teatro en el que él representa todos los papeles. Pero acaba interpretando su vida en lugar de vivirla. Si nos gustan los cambios, la vida bohemia, el mundo de las apariencias, debemos vivir con él.

CABALLO-CÁNCER: Le gustan los espacios sencillos y naturales, el campo que da seguridad. Aspira a vivir en él con los suyos. Por este hecho, sus ambiciones, sus deseos, sus necesidades son sencillas. Sin duda, para compensar sus angustias y sus cambios de humor, sus caprichos o sus dramas, que le hacen decir o hacer cualquier cosa a veces, aunque por poco rato.

CABALLO-LEO: Este nativo emana ambición, lujo, belleza, e inspira pasión. Pero es un eterno insatisfechho, siempre en busca de admiración, de reconocimiento, de aprovación. Aunque tenga carisma y seducción, se hace insoportable por su arrogancia y su egocentrismo. No soporta el conformismo y los lugares comunes, pero es incapaz de cuestionarse, de pensar un solo instante que se le puede llevar la contraria.

CABALLO-VIRGO: Adonde quiera que vaya y emprenda lo que emprenda, no se pierde jamás y no se desvía nunca de su ruta. Prevé todo de antemano. Tiene sentido del itinerario. No dudará en desviarse para evitar arriesgarse inútilmente o enfrentarse a lo desconocido. Para él lo importante es poder llegar a su meta a tiempo. Odia los retrasos y los contratiempos y puede montar un drama por una nimiedad. Es muy exigente hacia él mismo y a veces intransigente con las reglas y los principios. Pero es un excelente consejero.

CABALLO-LIBRA: Avanza con paso cadencioso y elegante. Todo su cuerpo se desenvuelve con gracia. Sus gestos son los precisos y delicados. Pero no se contenta con hablar con las manos, pues sabe que no hay nadie mejor que él para enunciar claramente y con habilidad lo que conoce a fondo. Si hay un mensaje que divulgar o una causa que defender, puedes contar con él: sabrá encontrar las palabras mecesarias, seducir, convencer. Y, además, se compromete, sobre todo si tú también lo estas.

CABALLO-ESCORPIO: Aunque sea fascinante, de pura raza, tranquilo, no hay que pensar que este nativo es un animal doméstico. Tiene una naturaleza salvaje, indomable y definitivamente indómita. Prefiere perderlo todo antes que rendirse, someterse u obedecer. De entrada adivina el pensamiento y las intenciones. Es muy difícil mentirle. Es impenetrable, misterioso, secreto, silencioso. Se va y vuelve. No intentéis obligarlo o retenerlo; no lo soportaría.

CABALLO-SAGITARIO: Es sin duda alguna el más fogoso y aventurero de todos los nativos de Sagitario, pero también el más puro de los nativos del Caballo chino. Nació libre y vive libre. Pero su libertad es placentera. No es reivindicativa ni molesta para los demás. Cuando se le conoce, ni se nos ocurrirá atarlo, como si se tratase de un sacrilegio. Lo observamos evolucionar y extraemos una lección de vida, sencilla, buena y natural. Sin embargo, es necesario que tenga un objetivo o una motivación, para no desbocarse.

CABALLO-CAPRICORNIO: Con él, no hay que fiarse nunca de las apariencias. Tiene buena voluntad, es comprensivo, entregado, pero se deja llevar por los sueños y su imaginación es desbordante. Tiene siempre algún plan o proyectos en la cabeza, le gustaría una vida nueva pero no sabe por dónde empezar. Si sabe elegir entre sus originales ideas, podrá sin duda realizar algo interesante para él y para los demás. Si no, vivirá aquí, pero tendrá siempre la cabeza en otro lugar.

CABALLO-ACUARIO: Quiere saberlo todo, entenderlo y conocerlo todo. Es un buscador de verdades que pone sus descubrimientos en práctica. Tiene ya un pie en el futuro. Piensa, adelanta, innova. Ayuda a encontrar soluciones prácticas a los problemas. Su carácter humanista e idealista lo incita a preocuparse por los demás tanto como por él mismo. Para él, solidaridad no es una palabra vana y la libertad es su razón de vivir.

CABALLO-PISCIS: Sabe que la verdad es una cosa cambiante y que la única cierta es la del momento. Como no teme las contradicciones, dice una cosa por la mañana y hace justo lo contrario por la noche. Hay que escucharlo sin creerlo. Pero es tan seductor que caemos en la tentación de creer en lo que nos dice. Se pasea, observa y se encamina hacia lo que le dicta el corazón. Es un oportunista ingenuo y espontáneo, muy receptivo y que sabe lo que debe hacer y adónde debe ir.

TAROT SABIDURÍA METAFÍSICA  -MARA-